Angelici, el presidente de Boca, estuvo en la casa de la familia Conmebol, en Asunción. |
Solución amigable, sin el rigor esperado, lo que demuestra
que los problemas del fútbol sudamericano son solucionados como en las mejores familias.
En pleno sábado, a puertas cerradas y con la presencia del presidente
del Boca Jr, Daniel Angelici, en la sede de la Conmebol, en Asunción, Paraguay,
dirigentes del Comité de Disciplina fueron camaradas y decidieron por una punición mucho más blanda
de lo que se preveía.
Boca Junior fue eliminado de la Libertadores y, como ya habíamos
adelantado el día viernes en este Blog, Ríver Plate fue clasificado a los
cuartos de final de la Libertadores frente al Cruzeiro, el próximo 22 de mayo.
Ese es el castigo futbolero impuesto a Boca por la Conmebol, después de
que jugadores del Ríver fueron atacados con gases en la Bombonera, al retornar
para el segundo tiempo, en el partido de vuelta por la Libertadores, el jueves
pasado.
El equipo xeneixe también deberá jugar sus 4 próximos partidos
internacionales, como local, a puertas cerradas, sin público, y otros 4, como
visitante, no podrá tener a su hinchada.
A ese castigo, fue adicionada una multa de 200 mil dólares.
La Conmebol no suspendió a la Bombonera y Boca Jr podrá jugar sus
partidos dentro de la Liga en su cancha, si la justicia argentina lo permite.
Todo bien, nada cambia en la Conmebol, el episódio Boca – River será olvidado
y no pasará nada, como en:
2012: En la final de la Copa Sudamericana en el Morumbí, jugadores argentinos
del Tigre no retornaron para el segundo tiempo contra el São Paulo, denunciando
que fueron agredidos por policías, en los camarines. São
Paulo fue declarado campeón.
2013: En partido jugado en Oruro, hinchas del Corinthians lanzan un
foguete y matan al joven Kevin Beltrán, aficionado del San José. El Corinthians
fue punido con la pérdida del derecho de jugar con público durante la primera
fase del torneo. Nada más.
2014: Tinga, volante del Cruzeiro, sufre insultos racistas por hinchas
del Garcilaso el Perú y el equipo peruano es multado con 12 mil dólares y la
Conmebol amenaza suspender el estadio “caso esa situación se repita”. Solamente.
Para la Conmebol, lo que importa son los intereses económicos que el
fútbol carga. Los futbolistas no son prioridad, parecen ser, apenas, objetos mercantiles.
Ya nada me sorprende.
No hay comentarios:
Publicar un comentario