Terminada la primera fase
del Torneo Apertura de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano, los altibajos
de todos los equipos son alarmantes y creo que algunos conceptos (ideas)
están enfrentados a lo que actualmente sucede en el fútbol mundial.
Entre muchos conceptos, el
más notorio, inclusive en la selección boliviana, es el puesto del futbolista
en el medio campo, porque creo que se confunde el concepto posición con el concepto
función.
En Bolivia continuamos
determinando las posiciones de los jugadores en el medio sector, como “volante
de contención” y “volante de creación” o “enganche”, cuando, en realidad, en el
fútbol moderno, estoy convencido. los medio campistas deben tener esas tres características o
funciones.
O sea, todos marcan, todos
crean y todos son enganches.
En ese concepto están
incluidos equipos que poseen la capacidad financiera de contar con grandes futbolistas como
Messi, Cristiano Ronaldo y Neymar.
Creo que cuando un medio sector
funciona acercándose a la perfección en el dominio de esas tres funciones, hace
con que sus defensas, que pasan a ser retaguardias, tengan más
posibilidades de cubrir con solvencia el trabajo del arquero.
Solo así tiene sentido,
dependiendo del adversario, el armar una
última línea con tres jugadores, pues eso permite jugar con dos laterales
volantes, fortaleciendo mucho más el medio sector, haciendo jugar al equipo con
un 3-5-2 o 3-4-3 cuando ataca, o un 5-4-1 cuando defiende.
También con una línea de cuatro
en la defensa, es posible tener un medio campo fuerte cualitativa y
cuantitativamente, desde que uno de los delanteros retroceda para la marca, formando
el 4-5-1 cuando defiende o el 4-4-2 o 4-3-3 cuando ataca.
Por eso, creo que no se
puede llegar al simplismo de decir que un equipo perdió por fallas de la
defensa, o dejó de ganar por deficiencia de sus atacantes.
Hoy, en el fútbol de cualquier
parte del mundo, el medio sector es el que determina los resultados.
Por todo ello es que para
cumplir las funciones de medio campista, es necesario estar con un cien por
ciento de su capacidad técnica y física. Y mejor si todo el equipo entra a la
cancha en esas condiciones.
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