Una derrota más, la segunda, y ya van 9 goles en nuestro equipaje.
Podían ser más.
Las dos derrotas de la selección boliviana sub-20 (Paraguay 2 x 4 y
Ecuador 0 x 5), no me sorprenden, para nada.
Al contrario, me permiten reafirmar que el fútbol presentado por los
jóvenes bolivianos en el sudamericano de la categoría en Uruguay, es el fiel
reflejo del balompié nacional.
Los muchos que viven soñando, deben convencerse, de una vez por todas,
que el futuro mediato de nuestro fútbol
es preocupante.
El equipo que está en Uruguay, es sin imaginación, sin noción de
posicionamiento táctico, sin percepción colectiva de ataque y defensa, y sin conocimiento,
mínimo que sea, de conceptos (por lo tanto ideas) modernos del fútbol.
Llevar cinco goles del Ecuador, debido a cinco (y muchas más) fallas
infantiles, ingenuas y total falta de capacidad técnica y táctica, es realmente
preocupante.
Si ese elenco de jóvenes que viajó al certamen es lo mejor que tenemos,
imaginemos el resto de la misma generación y otras menores que se quedaron en
el país.
O sea, hemos retrocedido en tiempo y lugar.
Triste, muy triste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario