Siempre tuve dudas cuanto al echo del automovilismo ser un deporte o no.
Sobretodo en los últimos años en que la máquina es más importante que el hombre.
El piloto será un vencedor si tiene una buena máquina, pero si así no fuere, será un simple conductor de vehículo en alta velocidad.
Mis dudas aumentaron más después de leer las declaraciones de “hombre fuerte” de la Fórmula 1, señor Bernie Ecclestone, que no es más que un simple detentor de los derechos de comercialización. Sus palabras, abren posibilidad de entender lo que pasa por la cabeza de estos señores.
Al intentar responder las acusaciones de que él maneja la F1 de forma dictatorial, Ecclestone sacó a luces su pensamiento:
"Si miramos para una democracia que no hace cosas para el país, entonces prefiero personas fuertes que mantienen su opinión”, dijo.
Cuando le preguntaron quién sería su dictador preferido, ahí Ecclestone mostró su verdadero rostro:
"A pesar de parecer terrible, supongo, que el hecho de que Hitler haya convencido personas a hacer lo que querían o no, estaba en el camino para controlar mucha gente”, respondió, acrecentando:
“Al final él (Hitler) perdió porque no fue un buen dictador, porque sabía que había cometido muchos errores, pero acabó insistiendo; así, de una manera o de otra, él no era un dictador”.
Para un circo que se mueve a millones de dólares, las palabras de su máxima autoridad pueden parecer vanas
Para mí, las dudas aumentan.
¿Al final, el automovilismo es un deporte o no lo es?
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