jueves, 10 de marzo de 2011

SOLIDARIDAD CON EL FÚTBOL BOLIVIANO



Confieso que no aguanto la emoción frente a la mínima muestra de solidaridad en lo que a relación entre seres humanos se refiere.


En muchas ocasiones en que los jugadores, al final de un partido arduamente disputado, se entrelazaban en abrazos, no aseguré las lágrimas. Y con micrófono en mano.


Cuento eso, porque me parece digno de recordar el comportamiento solidario de los ex y actuales jugadores de fútbol profesional boliviano con las víctimas de los desastres naturales ocurridos en La Paz.


El partido benéfico de los hombres que clasificaron a Bolivia a la Copa del Mundo USA-94, reforzados por el presidente del Estado Evo Morales, se está realizando en este mismo momento en que coloco estas líneas en el Blog. No interesa el resultado, lo que importa es la intención.


Ojalá que el sufrimiento de las víctimas acabe luego y que su vida retorne a la normalidad.


Pero no puedo dejar de recordar que la gran cantidad de familias alcanzada por las riadas se debe a la especulación inmobiliaria y a la ceguera de las autoridades que, a su turno, cerraron los ojos y permitieron la construcción de esos barrios en territorios condenados hace más de 50 años.


Una vez más, vamos directamente a buscar los medios para solucionar problemas hace mucho previsibles, en vez de atacar las causas.


Por ironía, igual que en el fútbol boliviano que está cayéndose en ruinas. La diferencia está en que nadie se atreve a ser solidario con él.

viernes, 4 de marzo de 2011

EL FÚTBOL BOLIVIANO A OSCURAS

Las palabras vertidas por el coronel Edgar Chuquímia del Comando de la policía boliviana con sede en La Paz, ilustran claramente cómo se trata el concepto seguridad en los estadios del país.


Si se hubiera callado, el coronel habría contribuido más para resolver los problemas del conturbado fútbol boliviano.



La mente brillante del jefe policial comparó al público futbolero de la ciudad de El Alto con “personas que asisten al cine.”



O sea, para el uniformado, el público alteño asiste a los juegos futbolísticos en silencio, sin gritar, sin emitir emociones a viva voz, sin moverse de sus butacas. Lo único que faltó es que diga que a la hinchada ve los partidos en la oscuridad.



Definitivamente, la metáfora utilizada por Chuquímia fue muy infeliz.



Peor, otra declaración del coronel también desnudó las deficiencias profesionales de nuestra policía: “No existe ninguna normativa policial, ya sea a nivel departamental o nacional, sobre la cual puedan basarse para los temas de seguridad…”.



Me pregunto: ¿el Cuerpo de Bomberos(que también es de la Policia) no tendrá una norma?



Al intentar caer bien y contentar a una ciudad que se caracteriza por su combatividad política, todos los defensores del estadio Los Andes de El Alto (inclusive periodistas deportivos), no hacen más que justificar el por qué nuestro país ocupa el último lugar en el ranking futbolístico en Sudamérica.

Pero lo que uno espera o, mejor, esperaba, era que la Policía Nacional actuara en cuestiones de seguridad pública, con base a conceptos técnicos y profesionales y no político-populistas.



Aún hay gente que piensa que fútbol profesional es solamente 22 hombres y tres árbitros corriendo atrás de una pelota.

La luz del tunel está cada vez más al fondo.